Tenemos una bonita historia de conexión que contar, la historia de Lola Echevarría, residente en el barrio de La Frontera, que movió cielo y tierra para movilizar a sus vecinos y al Ayuntamiento de Villaescusa (Cantabria) para que la fibra óptica llegase a su localidad.

 

 

Adamo puso todos sus recursos para poder llevar La Mega Fibra de forma urgente a esta zona que estaba a punto de perder la única conexión de ADSL que llegaba. La compañía que les daba servicio les había anunciado el apagado de la central de cobre, que dejaría a todos los vecinos desconectados y sin la línea de teléfono fijo que habían tenido siempre.

 

Acompáñanos a conocer a los protagonistas de esta mega historia de la mano de David Llano, nuestro área manager en la zona norte. ¡Sigue leyendo!

 

El barrio de La Frontera, en riesgo de desconexión

 

Villaescusa es un municipio cántabro que forma parte de la comarca de Santander, ubicado en el sur de su bahía. Sorprende que actualmente una zona tan próxima a un gran núcleo urbano como es la capital cántabra no cuente con un buen acceso a Internet.

 

Hace años, el municipio de Villaescusa fue cableado por Adamo, pero el barrio de La Frontera no quedó cubierto en el primer despliegue de fibra. Una zona en la que hay residencias, pero también comercios. Lola y sus vecinos resistieron durante años conectados por otra compañía mediante ADSL, con apenas 8 megas para navegar. 

 

Recientemente, su operadora les comunicó el apagado de la central de cobre, que implicaría la desconexión de su zona y la pérdida del número de teléfono fijo que habían tenido toda la vida. Les ofrecieron conexión por radio, una solución insuficiente para las necesidades actuales. Lola reaccionó rápidamente ante la noticia y se embarcó en una cruzada contrarreloj para evitar que sus vecinos se vieran en tales circunstancias.

 

En Adamo tenemos claro que a día de hoy la conexión no es un capricho, es una necesidad. Por eso no dudamos en priorizar este caso: necesitaban urgentemente una buena conexión a Internet en Villaescusa. Nos pusimos enseguida en marcha, coordinándonos con el Ayuntamiento y la ingeniería Ibiocom, para ayudar a los vecinos y cubrir sus necesidades.

 

 

Un plan urgente para desplegar fibra en Villaescusa

 

 

Todo comienza con la llamada de “Tanti”. Así es popularmente conocido Constantino Fernández Carral, alcalde del municipio de Villaescusa, quien se pone en contacto con nuestro área manager.

 

Constantino nos recibe en su despacho del consistorio. Nos cuenta de primera mano la situación de los vecinos de La Frontera y Riosapero. “Dos núcleos importantes están sin conexión y otras operadoras no van a llegar en el corto plazo”, explica el alcalde. Nos pide colaborar para dar servicio a los residentes de estas zonas, en su mayoría personas mayores que dependen de su teléfono fijo y pueden perder la línea si no migran a la fibra óptica.

 

El siguiente paso es la coordinación con la ingeniería. Hablamos con Julio César Gutiérrez, de nuestro equipo de ingeniería y estudiamos diferentes formas de dar servicio en esta zona, por ejemplo, llegar desde Guarnizo. Nos desplazamos sobre el terreno para hacer un estudio de campo y valorar cómo llevar La Mega Fibra.

 

Villaescusa, mega conectada a la fibra de Adamo

 

Como no podía ser de otra forma, la mega historia de Lola tiene un final muy feliz: sus vecinos ya están disfrutando de la fibra óptica en Villaescusa. Nos cuenta cómo la conexión del barrio de La Frontera a la fibra de 1.000 megas les ha cambiado la vida. 

 

 

Gracias a la colaboración y ayuda de Lola, ha mejorado el acceso a Internet en el municipio cántabro. Esta vecina fue la impulsora de la acción. Recurrió a Adamo haciendo posible la identificación de esta zona, llamó al alcalde y consiguió movilizar a sus vecinos. Tras mucho esfuerzo, han conseguido lo que querían: disfrutar de una mega conexión a Internet.

 

 

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